miércoles, 24 de marzo de 2010

¿Es lo normal?


El miércoles 24 de marzo de 2010, el Ayuntamiento de Valverde de Mérida aceptó el canon de sustitución de 10 millones de euros de la Multinacional Siemens con los votos de populares y socialistas.


Los tres concejales del grupo popular y los tres socialistas han unido sus votos para su aceptación. Los tres del grupo independiente se han mantenido firmes en su oposición al proyecto, votando en contra de la aceptación del canon de 10 millones de euros.


El Partido Popular de Valverde de Mérida, mientras dice mantener su promesa electoral de oponerse a las térmicas, y ante el asombro de los vecinos que acudieron al salón de plenos del Ayuntamiento, aceptó el convenio urbanístico con Siemens, el mismo que, en el Pleno de 30 de septiembre de 2009, se comprometió a no firmar. Por su parte, el partido socialista muestra su satisfacción por el cambio de parecer de los populares, y el alcalde, el popular Pedro Vizcaíno Ramírez, intenta sofocar las protestas de los vecinos advirtiendo con el desalojo de la sala.


Los populares y socialistas de Valverde, asegura el partido ecologista, dan luz verde a la calificación de los terrenos por parte de la Junta de Extremadura, una vez que se haya obtenido el resto de permisos administrativos que necesita un proyecto como este. El Ayuntamiento de Valverde pierde así, cualquier posibilidad real de oponerse al proyecto por el incumplimiento de las promesas electorales del partido popular, digan lo que digan a partir de ahora.


Los Verdes agradecen el interés de los vecinos y la firmeza de los independientes, algo poco usual en la política municipal cuando intervienen proyectos de esta envergadura, donde lo normal, como ha demostrado Valverde de Mérida, es cambiar el voto y responsabilizar a otros, en alusión a la posible calificación de los terrenos por parte de la Junta de Extremadura.


El suelo sobre el que Siemens pretende construir la Central Térmica de Ciclo Combinado, está clasificado como suelo no urbanizable por el planeamiento del municipio de Valverde de Mérida. Y por eso, y ante la negativa del Ayuntamiento a su recalificación, la empresa pidió la calificación urbanística de los terrenos a la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio, órgano competente de la Junta Extremadura para la calificación de terrenos en municipios de menos de 20.000 habitantes según la Ley del Suelo y Ordenación del Territorio de Extremadura.


Según dicha Ley, el Ayuntamiento de Valverde de Mérida debería firmar como requerimiento imprescindible para la calificación de los terrenos, amén de todos los permisos administrativos necesarios, un convenio urbanístico con la empresa en el que aceptaría el 15 por ciento del terreno rústico donde se pretende ubicar la Central Térmica o el canon sustitutivo del 2 por ciento del importe total de la inversión, ofreciendo la empresa 10 millones de euros, en caso de que el canon no alcanzase dicha cantidad.


Según la consulta realizada por Los Verdes de Extremadura a López Lax Abogados, bufete especializado en derecho medioambiental, la decisión de aceptación del canon o los terrenos carece de sentido en el momento actual del proyecto, y no es de aceptación obligada por carecer el proyecto de autorización ambiental integrada, autorización administrativa del Ministerio de Industria, y demás autorizaciones exigibles. Además, según el informe jurídico, el proyecto puede sufrir importantes modificaciones estructurales al incorporar medidas correctoras y compensatorias, que pueden variar la inversión que va a requerir y sus necesidades de suelo, por lo que se considera que su aceptación, como así ha sido, puede comprometer innecesariamente los intereses del municipio en perjuicio del interés general y del patrimonio municipal.