martes, 29 de diciembre de 2009
La Coordinadora Verde critica la prórroga del Plan 2000E de ayudas a la adquisición de automóviles para 2010.
La organización ecologista considera que la medida es una actuación contraproducente para el empleo, es social y ambientalmente desigual e injusta, favorece a las personas con más recursos económicos y agrava el cambio climático. Los Verdes apuestan por plantear y poner en marcha una reconversión del sector del autómovil hacia el transporte público.
La Coordinadora Verde denuncia que las ayudas públicas a la compra de coches a través de la prórroga del Plan 2000E para 2010 anunciadas por el gobierno español constituyen una respuesta irracional contra el medio ambiente y el planeta. Además de incitar al hiperconsumo, perpetúan el actual modelo individualizado y motorizado de transporte e infraestructuras.
Para la plataforma ecologista, atrás quedan las palabras de compromiso del gobierno contra el cambio climático y a favor de la reducción de las emisiones de C02. En palabras de Florent Marcellesi, coportavoz de la Coordinadora Verde, "a pesar de algunos topes necesarios de emisiones de C02 para los nuevos coches, conviene recordar que las tecnologías anacrónicas basadas en el petróleo, como son los automóviles con motores de combustión, son muy responsables de la creciente destrucción del planeta y del cambio climático y ejercen una fuerte demanda sobre las infraestructuras viarias."
Continúa el portavoz ecologista: "dar 100 millones de euros al programa de subvención pública de vehículos premia al consumo individual ambientalmente irresponsable y favorece a un sector que no ha hecho sus deberes climáticos y ecológicos de fabricar coches más limpios." Según Marcellesi "esta respuesta a la crisis económica es además una medida socialmente injusta ya que se hace en detrimento del transporte público y limpio que utilizan las personas con menos recursos económicos."
Para Sonia Ortiga, coportavoz de la Coordinadora Verde "las respuestas económicas al paro no deben contradecir los objetivos medioambientales y de igualdad social. La actual crisis económica debe convertirse en una oportunidad para crear un nuevo empleo verde capaz de hacer las paces con el planeta. El dinero público puede crear mucho más empleo si se compatibiliza con la protección ecológica y climática. Se crearía el doble de puestos de trabajo si se emplearan por ejemplo en subvencionar la rehabilitación energética de edificios y viviendas. También se debería plantear y poner en marcha una reconversión del sector del autómovil hacia el transporte público."
Para la Coordinadora Verde existen otras alternativas para generar tejido socioeconómico y afrontar a la vez el caos climático y la destrucción ecológica.: las obras de rehabilitación realizadas mediante técnicas y materiales bioclimáticos, la instalacion de energía solar térmica en los tejados de los edificios, las medidas de aislamiento y mejoras en la instalación eléctrica, los electrodomésticos de bajo consumo o el uso de materiales ecológicos junto al ahorro y la eficiencia energética son, entre otras, algunas de las medidas urgentes que el gobierno debería favorecer.
Ortiga concluye: "Puesto que los costes de transporte castigan a los más pobres durante la crisis económica, la reactivación de la economía y el empleo deben optar por inversiones social y ambientalmente rentables, como son las dirigidas a la mejora y la ampliación del transporte público y limpio -como un sistema de alquiler de bici- con medidas sociales complementarias de protección, como pueden ser el metro o bus gratis para parados, estudiantes y personas con pocos recursos económicos."