El alcalde de Cabezuela del Valle, con los votos a favor de SIEX y PP, aprueba la construcción de una macro-urbanización junto a la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos, en el Valle del Jerte.
La formación Ecolo-Verdes Valle del Jerte a través de su portavoz, Nicolás Paz, denuncia en comunicado de prensa la insostenibilidad del proyecto, que atenta contra los recursos de agua de los vecinos de Cabezuela y contra sus agricultores. Según la formación ecologista, este proyecto no tiene ninguna utilidad pública para los vecinos de Cabezuela, supone un atentado ecológico para todo el Valle del Jerte y es un modelo de desarrollo que sólo beneficia a sus promotores.
Ecolo-Verdes Valle del Jerte se presentó en el pleno donde vecinos y vecinas de Cabezuela y miembros de diferentes asociaciones acudieron también para protestar por el proyecto, la falta de información al respecto y por la prisa con la que los grupos en el gobierno han querido aprobarlo. El acto se desarrolló con gran tensión; el alcalde, Antonio Domínguez Sánchez, del grupo Socialistas Independientes de Extremadura (SIEX), hizo llamar a la policía local y estuvo a punto de acabar con el cierre del pleno al público y la expulsión de los asistentes. Finalmente, el proyecto quedó aprobado con los votos a favor de SIEX y el Partido Popular. Dos concejales del PSOE se encontraban ausentes del pleno; votaron en contra la concejala no adscrita Olivia Cano y los dos concejales del PSOE presentes.
Ecolo-Verdes Extremadura denuncia que la Junta de Extremadura haya tomado la decisión de no someter a evaluación ambiental estratégica esta modificación puntual, que convierte 136.377 m2 de suelo rústico en suelo urbanizable. La formación espera, a pesar de todo, que la Confederación Hidrográfica del Tajo y la evaluación de impacto ambiental acaben siendo negativas, pero condenan la actitud del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Cabezuela, así como la medida de excepción de la Junta, y no entienden cuáles son los motivos que se ocultan tras estas decisiones políticas, que no responden a ningún interés general en la comarca y ponen en peligro la sostenibilidad de sus pueblos y sus recursos naturales.
